Presencia de estudiantes extranjeros cae en un 30%

La llegada de estudiantes extranjeros a Cochabamba ha caído entre un 20 y 30 por ciento en los últimos dos años por varios motivos, informó ayer el secretario general de la Universidad Franz Tamayo (Unifranz), Edwin Rossel.

Se estiman que actualmente hay 12 mil estudiantes matriculados en las universidades privadas de Cochabamba, principalmente en las carreras de ciencias de la salud, como Medicina y Odontología. Antes, la cifra pasaba los 12 mil y tenía un efecto multiplicador en la economía local.

“Hemos visto que ha mermado la cantidad de estudiantes extranjeros, en este caso más brasileños y peruanos”, declaró Rossel.

Explicó que si bien son varios los motivos para que haya una disminución en la llegada de extranjeros, uno de ellos es la burocracia de los trámites.

“En vista de este bajo número que tenemos, se ha visto la necesidad de hablar con instituciones como Segip y Migración. También involucrar a los países que estarían en esto, Brasil y Perú”, expresó Edwin Rossel.

Unifranz cuenta con una importante cantidad de estudiantes extranjeros de Brasil, Perú, Argentina, Colombia y de otras nacionalidades, que superan los mil en su comunidad universitaria, por lo que implementa planes para incentivar a los jóvenes a venir a Cochabamba para profesionalizarse.

Como parte de esas estrategias, ayer se inauguraron las jornadas de información para que los estudiantes extranjeros de todas las universidades puedan hacer consultas a Migración y el Segip sobre las visas y residencia.

El taller termina hoy en la sede de Unifranz, ubicada en la calle Portales esquina Villarroel, con una atención personalizada. Los universitarios podrán llevar sus con documentos para hacer consultas a Migración y el Segip.

“Estamos haciendo estas jornadas como Unifranz con la intención de brindar a los estudiantes información para que sepan los requisitos que deben presentar para tener sus documentos, para que puedan tener una estadía adecuada y correcta”, declaró.

Otros datos señalan que es posible recuperar el interés de los estudiantes, porque Cochabamba cuenta con las condiciones para ser una ciudad universitaria. El último dato de 2018 sobre la matriculación revela un leve aumento de 4 por ciento en las inscripciones. A ello se suma que Migración atendió 780 visas de estudio el primer semestre.

DATOS

Cónsul insta a integrarse y aprender el idioma. La cónsul de Brasil, Andrea Saldana da Gama, instó a los estudiantes a integrarse a la comunidad boliviana.

Perú pide a jóvenes valorar esfuerzo de padres. El cónsul de Perú, José Luis Torrez, pidió a los estudiantes a corresponder al sacrificio económico que hacen sus padres al enviarlos a estudiar.

Unifranz, con unidades en dos países. El secretario general nacional de Unifranz, Edwin Rossel, informó que cuentan con unidades en Brasil y Perú que promocionan el servicio que brinda la universidad.

LA VISA MERCOSUR, SENCILLA Y ECONÓMICA

Los estudiantes de los países del Mercosur pueden continuar sus estudios en las universidades bolivianas a través de la Visa Mercosur, que se tramita con cuatro requisitos: el certificado de antecedentes policiales, de nacimiento, matrimonio (para casados) y dos fotografías.

El costo es de 450 Unidades de Fomento a la Vivienda (UFVs), que al tipo de cambio es de 1.027 bolivianos.

El representante de Extranjería de Migración, Marco Arandia, explicó que los trámites son personales y no es necesario un tramitador.

Añadió que otra alternativa para la estadía por estudio es la residencia permanente Mercosur, que se puede obtener tres meses antes al vencimiento de la visa.

Los requisitos son fotocopias del pasaporte y del carnet de extranjería. Además del Rejap, que son los antecedentes de Bolivia y el certificado de alumno regular.

El director del Segip, Eliodoro Michel, explicó que la cédula para extranjeros se emite en su sede de Colcapirhua, en la Blanco Galindo.

Algunos estudiantes expresaron que, entre las dificultades que tienen para sacar sus papeles, está que tienen que ir por varias instituciones.

Fuente: Los Tiempos